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Cuando empezamos a practicar Yoga, se presenta la primera duda. ¿Qué estilo de Yoga practicar? ¿Cuántos estilos hay?
Veamos si podemos poner un poco de luz en esto de los estilos de Yoga.
Origen de los estilos de Yoga
Antes del boom del yoga en el Siglo XX la clasificación de los tipos de Yoga existentes era muy distinta a la actual.
En su origen, Yoga se practicaba para tener el cuerpo estable y libre de molestias, con la energía suficiente para que nos mantuviera sin distracciones en postura de meditación, y en estado meditativo.
Pero llegó el Siglo XX y la práctica de Yoga se extendió por occidente.
Empezó a entrar en el mercado y ser interesante económicamente por lo que surgieron varios estilos de Yoga, muchos de ellos relacionados con la figura de un profesor que establecía ciertas normas.
Pero estas normas no tenían en cuenta la diferencia entre cada persona que practica y ahí ha residido el problema principal en la actualidad.
Al evolucionar áreas de la medicina, fisiología, anatomía, psicología etc se ha demostrado que no hay dos personas iguales, por lo que no debería haber dos prácticas iguales.
Ése es uno de los principios de la metodología BSMT-Yoga.
Hay distintas maneras de practicar con distintos nombres, pero estos estilos son variaciones modernas del Hatha Yoga
Tipos de Yoga
Hatha Yoga
Normalmente define una práctica centrada en las posturas o asanas que se mantienen durante más tiempo para poder entender la biomecánica de la postura, dirigir la respiración y encontrar las resistencias, etc.
Depende del enfoque del profesor pero lo que la distingue principalmente es que no fluyes entre asanas, y te quedas más tiempo en ellas.
Es una práctica de ritmo más lento con posturas, podemos decir, estáticas.
Es lo más parecido a la manera clásica de practicar Yoga.
Es un estilo de Yoga más dinámico donde se van encadenando posturas, se centra más en el movimiento y las transiciones.
Dentro de esto, hay vinyasas más lentos y otros de ritmos más rápido.
El ritmo es fundamental pues tiene un efecto sobre nuestro sistema nervioso y el estado de nuestra mente.
Vinyasa es ideal si tenemos cierta experiencia en la parte física del yoga o conocimiento de las asanas ya que al haber cambios rápidos entre posturas y no mucho tiempo para explicar la alineación de cada una de ellas, un principiante se puede sentir perdido durante la secuencia o llegar a hacerse daño.
Yin Yoga
Es una práctica lenta, reflexiva, en la que las posturas se mantienen durante un tiempo prolongado y cuyo objetivo es trabajar el tejido conectivo o fascia.
Casi todas las posturas son sentados o tumbados, se invita a la relajación, meditación e introspección.
El efecto es calmante siempre y cuando estés cómoda en la quietud.
Yoga Restaurativo
Puede parecer similar a Yin Yoga pero el objetivo es distinto: restaurar el equilibrio y salud óptima del cuerpo.
Se suele utilizar material de apoyo (props) para ayudar a “abrir” suavemente distintas zonas del cuerpo proporcionando un profundo estado de relajación y calma así como la restauración del Sistema Nervioso ayudándonos al descanso.
Yoga Nidra
Una práctica que a menudo se confunde con Relajaciones Guiadas que se hacen tumbados de espaldas en Shavasana.
Yoga Nidra es profundamente relajante y restauradora, el maestro va guiando a la atención del alumno por distintas zonas del cuerpo, imágenes con el objetivo de recoger su atención y llevarle a un estado de consciencia conocido como Yoga Nidra donde el resultado será tranquilidad y paz interior en tu día a día.
Las relajaciones guiadas son calmantes, y tienen distintos objetivos: creatividad, descanso, recuperación tras una enfermedad, energía, etc. Son la preparación o antesala de Yoga Nidra.
Otros estilos de yoga
Dentro de los estilos asociados a una figura y que reciben su nombre del fundador, encontramos distintas maneras de practicar.
El movimiento #Me too, así como nuevos descubrimientos sobre anatomía y biomecánica aplicados al Yoga, han hecho que muchos de ellos entren en declive.
Iyengar
Podemos clasificarlo como Hatha con enfoque en principios de alineación establecidos por su fundador, B. K. S Iyengar
Ashtanga
Fundada por Pattabhi Jois, colega de Iyengar, se basa en una secuencia cerrada de posturas que se practican de manera rápida y fluida.
Kundalini de Yogi Bhajan
No confundir con Kundalini Yoga, un estilo de yoga tántrico clásico.
En Kundalini de Yogi Bhajan se trata de secuencias o kriyas cerradas que incluyen trabajo respiratorio intenso así como meditaciones con uso habitual de mantras de la tradición Sikh
Bikram
Una secuencia cerrada, creada por Bikram Choudhury que se practica en salas con calor (temperatura a 40 grados).
Jivamukti, Yoga Integral, Sivananda, etc. son otros estilos contemporáneos basados en la experiencia personal de los fundadores.
Cada uno incluye distinto orden a la hora de practicar, trabajo de respiración etc.
Son muy útiles para empezar a practicar: explora, cambia si alguno no te convence, da varias oportunidades, muchas veces cambiando de profesor cambia completamente nuestra experiencia.
Reconoce qué te sienta bien y encuentra tu propia práctica.
IMPORTANTE
En los últimos años han salido a la luz los abusos ejercidos por ciertos fundadores de estilos de yoga a sus alumnos.
Para más información, la encontrarás principalmente en inglés poniendo en google “nombre del profesor/estilo + me too”.
Si nuestra práctica es un pilar de bienestar y espiritual en nuestra vida, es importante saber por qué practicamos lo que practicamos y de dónde viene. De esta manera podemos elegir conscientemente aquello que nos transforma, apoyamos y forma parte de nosotros.
¿Cómo saber qué tipo de Yoga elegir?
Define tu objetivo
Depende de lo que te guste y cuál sea tu objetivo, eso es lo primero a definir. Todos los estilos persiguen obtener los beneficios de prácticar Yoga aunque cada uno tiene un enfoque y unos objetivos diferentes.
Hatha Yoga y Yin Yoga
Si es la primera vez que vamos a hacer yoga podemos empezar con Hatha Yoga y Yin Yoga.
En los dos estilos nos detenemos en las posturas lo suficiente para que empieces a familiarizarte con tu rango de movimiento, tu alineación en cada postura, qué es lo importante en cada asana, qué sientes…
En BSMT- Yoga empezaríamos por Movilizar y las prácticas más lentas de Liberar en las que empiezas a familiarizarte con las posturas y mejorar tu respiración así como a afectar al sistema nervioso de manera saludable.
Vinyasa Yoga
Una vez que tienes algo de conocimientos empieza a explorar prácticas más dinámicas como Vinyasa y que incluyan técnicas más avanzadas de Yoga como pranayama (respiración), meditación, focos de atención, etc.
Las prácticas más fluidas en Vinyasa las encontrarás en Liberar mientras que en Transformar se recogen técnicas avanzadas de Yoga como bandas, pranayama, mucdras, mantra etc.
Obsérvate y persevera en lo que te genera resistencia
Obsérvate, eres lo importante.
La práctica de Yoga se adapta a ti y no al revés.
Y dale oportunidad a aquellas prácticas que te generan más resistencia.
Muchas veces lo que más necesitamos es lo que menos nos atrae.
Por ejemplo si somos tranquilos, nos gusta la lentitud, reflexión y calma, podemos sentirnos más atraídos por prácticas como Yin o las lentas de Liberar.
Pero lo que en realidad necesitamos, y nos va a sentar muy bien, son las de más movimiento y dinamismo que nos despierten y nos saquen de ese estado de suave letargo.
Así que la recomendación es que explores y que te observes, no sólo al finalizar la clase sino a lo largo del día.
Si te sientes en calma, con energía estable, concentrado… vas por buen camino
Explora y combina
Por último: explora y combina.
No le des a tu cuerpo siempre lo mismo.
Combina prácticas de movilidad con otras más lentas, explorar con tu cuerpo un día y técnicas de meditación otro…
De esta manera afectarás a distintos aspectos de tu ser, y con el tiempo, verás que, lo que trabajas desde diferentes prismas, empiezan a fluir en sintonía: entiendes más tu cuerpo y tus emociones, te diviertes con el movimiento, estás y puedes mantenerte en calma, más perspectiva, el sistema nervioso regulado, etc.